Así lo aseguraron desde la Fiscalía del Tercer Turno de Carlos Paz, a cargo de Jorgelina Gómez. Los dos policías que intervinieron en el control en el que terminó muerto Franco Amaya tenían alcohol en sangre.

“Se ha determinado la presencia de alcohol en sangre. En un primer momento de la investigación dentro de las medidas que se adoptan por parte de la Fiscalía, se ordena la extracción de sangre”, dijo la fiscal Jorgelina Gómez a Radio Mitre. “Al analizar se determinó un porcentaje de etanol en sangre por lo que al prestar el servicio estaban bajo los efectos de éste”, agregó.

Rodrigo Bustos, el autor del disparo, tenía un porcentaje de 0.84 de alcohol en sangre mientras que José Villagra, el policía a cargo del operativo, presentaba un nivel de 0.87.

Bustos está imputado de homicidio calificado, con prisión preventiva mientras que su compañero está en libertad acusado de omisión de los deberes de funcionario público.